La recolección de datos es un proceso de reunión sistemática de información como parte de una evaluación. La evaluación es un término más amplio que se refiere a todos los métodos para determinar lo que ocurre como resultado de aplicar una intervención o práctica específica. El conocimiento que los profesionales y las familias obtienen de evaluar una práctica a través de la recolección de datos les permite entender mejor los efectos de la intervención, hacer los cambios apropiados a las prácticas actuales, o planear nuevas intervenciones, si es necesario. Por ejemplo, en el caso de Luke recolectar datos sobre su progreso en la casa y en la escuela debido a la implementación de intervenciones incorporadas ayuda al equipo a determinar si las estrategias de intervención actuales están funcionando. Los resultados de una evaluación también pueden indicar la necesidad de considerar estrategias adicionales para favorecer el aprendizaje de Luke.
Para ver cómo funcionan las intervenciones incorporadas, Jackie y la familia de Luke tendrán que recolectar datos para evaluar los efectos del aprendizaje incorporado en el progreso de Luke en cuanto a la adquisición de nuevas capacidades. Las pautas de recolección de datos que especifican las maneras de medir las metas y la frecuencia con que el establecimiento va a reportar el progreso deben documentarse en el IEP de Luke.